El doctor Howard Gardner,
director del Proyecto Zero y profesor de psicología y ciencias de la educación
en la Universidad de Harvard, ha propuesto desde 1993 su teoría de las
Inteligencias Múltiples. A través de esta teoría el Dr Gardner llegó a la conclusión
de que la inteligencia no es algo innato y fijo que domina todas las destrezas
y habilidades de resolución de problemas que posee el ser humano, ha
establecido que la inteligencia está localizada en diferentes áreas del
cerebro, interconectadas entre sí y que pueden también trabajar en forma
individual, teniendo la propiedad de desarrollarse ampliamente si encuentran un
ambiente que ofrezca las condiciones necesarias para ello.
• La inteligencia
lingüística-verbal: es la capacidad de emplear de manera eficaz las
palabras, manipulando la estructura o sintaxis del lenguaje, la fonética, la
semántica, y sus dimensiones prácticas.
Está en los niños a los
que les encanta redactar historias, leer, jugar con rimas, trabalenguas y en
los que aprenden con facilidad otros idiomas.
• La inteligencia física-cinestésica: es la habilidad para usar el propio cuerpo para expresar ideas y sentimientos, y sus particularidades de coordinación, equilibrio, destreza, fuerza, flexibilidad y velocidad, así como propioceptivas y táctiles.
• La inteligencia física-cinestésica: es la habilidad para usar el propio cuerpo para expresar ideas y sentimientos, y sus particularidades de coordinación, equilibrio, destreza, fuerza, flexibilidad y velocidad, así como propioceptivas y táctiles.
Se la aprecia en los niños
que se destacan en actividades deportivas, danza, expresión corporal y/o en
trabajos de construcciones utilizando diversos materiales concretos. También en
aquellos que son hábiles en la ejecución de instrumentos.
• La inteligencia
lógica-matemática: es la capacidad de manejar números, relaciones y
patrones lógicos de manera eficaz, así como otras funciones y abstracciones de
este tipo.
Los niños que la han
desarrollado analizan con facilidad planteamientos y problemas. Se acercan a
los cálculos numéricos, estadísticas y presupuestos con entusiasmo.
• La inteligencia
espacial: es la habilidad de apreciar con certeza la imagen visual y
espacial, de representarse gráficamente las ideas, y de sensibilizar el color,
la línea, la forma, la figura, el espacio y sus interrelaciones.
Está en los niños que
estudian mejor con gráficos, esquemas, cuadros. Les gusta hacer mapas
conceptuales y mentales. Entienden muy bien planos y croquis.
• La inteligencia musical: es
la capacidad de percibir, distinguir, transformar y expresar el ritmo, timbre y
tono de los sonidos musicales.
Los niños que la
evidencian se sienten atraídos por los sonidos de la naturaleza y por todo tipo
de melodías. Disfrutan siguiendo el compás con el pie, golpeando o sacudiendo
algún objeto rítmicamente.
• La inteligencia
interpersonal: es la posibilidad de distinguir y percibir los estados
emocionales y signos interpersonales de los demás, y responder de manera
efectiva a dichas acciones de forma práctica.
La tienen los niños que
disfrutan trabajando en grupo, que son convincentes en sus negociaciones con
pares y mayores, que entienden al compañero.
• La inteligencia
intrapersonal: es la habilidad de la autoinstrospección, y de actuar
consecuentemente sobre la base de este conocimiento, de tener una autoimagen
acertada, y capacidad de autodisciplina, comprensión y amor propio.
La evidencian los niños
que son reflexivos, de razonamiento acertado y suelen ser consejeros de sus pares.
• La inteligencia
naturalista: es la capacidad de distinguir, clasificar y utilizar
elementos del medio ambiente, objetos, animales o plantas. Tanto del ambiente
urbano como suburbano o rural. Incluye las habilidades de observación,
experimentación, reflexión y cuestionamiento de nuestro entorno.